La Real Academia Sevillana fue creada por el Decreto 68/1990 de 27 de febrero del Consejo de Gobierno andaluz, a la sazón presidido por D. José Rodríguez de la Borbolla y Camoyán, a propuesta del Consejero de Educación y Ciencia D. Antonio Pascual Acosta. Como Anexo al Decreto fueron aprobados sus Estatutos.
Su creación fue realizada a petición de tres instituciones señeras del ámbito jurídico sevillano: su Colegio de Abogados, el Colegio Notarial de Sevilla y la Facultad de Derecho de la Universidad hispalense.
Una vez creada la Academia se constituyó una Junta Gestora formada por representantes de las tres instituciones antes mencionadas más el Presidente de la Audiencia Provincial de Sevilla y el Delegado Territorial del Colegio Nacional de Registradores de la Propiedad de Andalucía. Esta Junta formuló al titular de la Consejería de Educación y Ciencia la propuesta de nombramiento de los ocho primeros Académicos Numerarios, que así quedaron exentos de cumplir los requisitos ordinarios para la elección e investidura.
Por Orden de dicha Consejería de fecha 10 de julio de 1990 fueron nombrados, tomando posesión de sus cargos y respectivas medallas en acto solemne celebrado en el Salón Almirante de los Reales Alcázares, el día 11 de diciembre de 1990. Los designados fueron los Excmos. e Ilmos. señores siguientes, por orden de edad: Ángel Olavarría Téllez, José Ramón Cisneros Palacios, José Manuel Vázquez Sanz, Manuel Clavero Arévalo, Joaquín Lanzas Galvache, Juan Antonio Carrillo Salcedo, Guillermo J. Jiménez Sánchez y Francisco Baena Bocanegra. Conforme a lo previsto en el propio Decreto de creación quedó investido como Presidente en funciones el primero de los citados. Hay que destacar el hecho de que ya en este momento constitutivo pudo lucir la Academia su título de Real, merced a la concesión que a tal efecto otorgó en la víspera de su constitución S.M. el Rey de España.
Quedaba la nueva Junta emplazada para reunirse y proceder a la elección de ocho nuevos Académicos numerarios, reunión que se produjo algunos días después –diciembre, 1990- resultando nombrados los siguientes, por orden alfabético: Ignacio Casado de Cepeda, Javier Lasarte Álvarez, José Martínez Gijón, Juan Moya García, Manuel Olivencia Ruiz, Francisco Piñero Carrión, Pedro Luis Serrera Contreras y Victorio Magariños Blanco, quienes fueron tomando posesión sucesivamente tras las respectivas lecturas de sus discursos de ingreso. Concluido este proceso de integración de los dieciséis primeros miembros, fueron incorporándose nuevos Académicos numerarios hasta completar el número de veintiocho previsto en los Estatutos.
La Real Academia Sevillana de Legislación y Jurisprudencia tiene actualmente su sede, en virtud de generosa cesión del Colegio Notarial de Andalucía (sede de Sevilla), en el número 1 de la Calle de San Miguel de Sevilla, donde dicho Colegio reside.